Desde las verdes llanuras de la sabana bogotana surge la Hacienda Fagua, un lugar impregnado de tradición, hospitalidad y magia. Más que un espacio para eventos, ha sido el hogar de generaciones locales, donde cada festín culinario y celebración ha dejado una huella eterna. Con sus muros de adobe y tejas de barro, Fagua es un símbolo de hospitalidad y buen gusto, donde la tradición se entrelaza con el presente y el futuro.
A sólo 45 minutos de Bogotá, La Hacienda Fagua es una
narrativa donde la magia y la realidad convergen en un relato de belleza y encanto.
En este rincón ancestral, los primos Beatriz y Enrique fueron el catalizador de una historia que va más allá de los límites de la arquitectura colonial.
Ellos, los fundadores, se hicieron además los guardianes de un legado de hospitalidad, y buen gusto que ha trascendido generaciones.
La Hacienda Fagua, desde sus albores, más que un lugar de eventos; ha sido el hogar de locales y sus familias, una oportunidad para generaciones enteras que comparten la herencia de un vínculo con la tierra que perdura en el tiempo.